
El Congreso Mundial de los Ucranianos (CMU) celebra la intención declarada del presidente Trump de promover la paz en Ucrania. Cualquier esfuerzo sincero para poner fin a la brutal guerra de agresión de Rusia y restablecer la estabilidad en Europa merece apoyo. Instamos al presidente Trump a apoyar firmemente al pueblo ucraniano, que ha sufrido una guerra injusta de ocupación, destrucción y sufrimiento humano a una escala sin precedentes en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Como declaró el Presidente del CMU, Pavló Grod:
“La paz no puede lograrse a costa de la soberanía de Ucrania. El camino a seguir debe fortalecer el derecho de Ucrania a determinar su propio futuro, proteger a su pueblo y defender el derecho internacional”.
Vladimir Putin no muestra ninguna voluntad de paz. Los bombardeos nocturnos y diarios contra ciudades y civiles ucranianos continúan, y su objetivo declarado es la destrucción del pueblo ucraniano y la ocupación de Ucrania. El presidente Trump debe abordar cualquier negociación desde una posición de fuerza, considerando a Rusia como un adversario, no como un socio. Cualquier otra medida solo envalentonará a Putin.
No se puede confiar en Rusia. Ha violado todos los acuerdos internacionales relativos a Ucrania y lo volverá a hacer. El CMU, junto con nuestras organizaciones constituyentes, como el Comité del Congreso Ucraniano de América, y nuestros socios globales, no permitirá que Rusia engañe a Estados Unidos ni a la comunidad internacional para que renuncie a la soberanía de Ucrania. Rusia debe ser castigada y responsabilizada por sus crímenes, no recompensada. Apoyamos plenamente el reciente llamamiento del presidente Zelenski a la fuerza y la unidad para hacer frente a la agresión rusa.
Guiados por nuestra postura de nueve puntos, descrita en el llamamiento del Congreso Mundial Ucraniano y el Congreso Europeo Ucraniano a los líderes mundiales, y en consonancia con las recientes declaraciones de los Ocho Nórdicos-Bálticos y los líderes europeos, enfatizamos:
- Nada sobre Ucrania sin Ucrania: Ucrania debe participar plenamente en cualquier negociación.
- Respeto a la soberanía y la integridad territorial: Todas las fronteras internacionalmente reconocidas deben ser restauradas por completo.
- Alto el fuego antes de las negociaciones: Cualquier proceso diplomático solo es posible tras un cese de hostilidades verificado. Garantías de seguridad efectivas: Ucrania debe contar con los medios y las garantías para su autodefensa.
- Apoyo internacional sostenido: Las negociaciones de paz deben ir acompañadas de una asistencia militar, económica y política sustancial y sostenida.
- Sanciones hasta la retirada total y rendición de cuentas: Las sanciones deben mantenerse hasta que Rusia retire completamente sus fuerzas y rinda cuentas.
- Justicia para las víctimas: Es necesario reparar y enjuiciar a los criminales de guerra.
- Retorno de niños y prisioneros de guerra secuestrados: Retorno inmediato de más de 20.000 niños ucranianos secuestrados ilegalmente y liberación de miles de civiles y prisioneros de guerra.
- Democracia libre y justa de posguerra: Solo se pueden celebrar elecciones en una Ucrania segura, libre de ocupación.
- La seguridad de Ucrania es la seguridad de Europa: Una Ucrania fuerte fortalece el mundo democrático.
Instamos al presidente Trump, a Estados Unidos y a todos los aliados democráticos a unirse en torno a estos principios. Una paz duradera requiere fuerza, justicia y un compromiso inquebrantable con la soberanía de Ucrania.